Fue hace 28 años. El PNV había decidido convocar una manifestación contra ETA. Iba a tener lugar en Bilbao. Recuerdo que la izquierda abertzale arremetió contra nosotros con una dureza inusitada. De entre las críticas que recibimos, destacó la proferida por Mario Onaindia, que nos tildó de oportunistas, mientras vaticinaba que todo lo que aquel gesto nos iba a permitir ganar por la derecha, íbamos a perderlo por la izquierda. Y aprovechó la ocasión para criticar una vez más el abertzalismo claudicante de un PNV que, en su opinión, renunciaba a las reivindicaciones nacionales más elementales.
Después, Onaindia evolucionó. Y lo hizo con tanta energía, que acabó militando en el PSOE y escribiendo libros furibundamente antinacionalistas. La izquierda abertzale radical que profesaba en 1978, se convirtió, con el paso de los lustros, en una socialdemocracia tenue y antiabertzale. En lo social, su pensamiento político evolucionó 89 grados. Pero en lo nacional, 180. Eso sí, continuó dándonos clases de racionalidad y coherencia políticas, hasta su muerte.
No ha sido el peor. Otros, que en el pasado fueron, también, izquierdistas e hiper abertzales, militan, ahora, en el PP. Es el caso de Jon Juaristi. Su giro ha sido de 180 grados, tanto en lo social, como en lo nacional.
Quienes definen su identidad ideológica sobre el doble pilar izquierdista e independentista, gozan, siempre, de amplias ventajas a la hora de situarse y actuar en el terreno político. Su nacionalismo radical les permite criticar a los nacionalistas tibios, acusándolos de traidores y vendepatrias, sin que eso les impida a ellos acogerse a su identidad de izquierdas, para entenderse políticamente con partidos españoles (también de izquierdas), sin que su ideario se resienta lo más mínimo. Porque son independentistas, pero también son de izquierdas. Y el eje de sus alianzas puede ser el nacional, pero también puede ser el social. Y los dos ejes forman parte de su identidad política. Esto ocurrió con muchos de los antiguos Euskadiko Ezkerras. Que se quedaron en el PSOE, sin que se les alterara lo más mínimo el color y el gesto de la cara. Pero la historia no acabó con ellos. Hay otros en similar situación que, mucho me temo, acabarán haciendo lo mismo.
El de ERC es un ejemplo paradigmático de esto que digo. En cuestión de meses, ha contorsionado sus mensajes, hasta extremos increíbles. Hace unos meses, su secretario general, Joan Puigcercós, declaraba a un diario vasco (DEIA 8 de mayo de 2006) que la vocación de su partido consistía en conformar un núcleo independentista y de izquierdas, frente al regionalismo de CiU que, en su opinión, estaba, cada vez, más cerca del PSC. ¿No teme un futuro pacto de gobierno de CiU y PSC en la Generalitat?, le preguntaba el periodista. Su respuesta era terminante:
“Sí me da miedo la sociovergencia, pero es legítima. Si deciden pactar, que lo hagan. Eso clarificaría mucho las cosas, porque Cataluña avanza hacia un modelo de tres espacios políticos, que se van a poder ver en el referéndum: el regionalismo centrista de CiU y el PSC, el españolismo de derechas del PP, y el independentismo de izquierdas de ERC”
La izquierda abertzale auténtica era ERC. Auténtica en lo abertzale y auténtica en lo izquierdoso. Si CiU pactaba con el PSC, estaría contribuyendo a la conformación de una suerte de “regionalismo centrista”, entregado a la causa española. Pero con ellos no existía ese riesgo. Ellos eran “el independentismo de izquierdas”.
Una vez celebradas las elecciones, todo el mundo ha podido comprobar que quien se ha ido con el PSC, arrinconando al partido más votado en todas las circunscripciones, no ha sido el “regionalista” CiU, sino el “independentista” ERC. ¿Cómo ha podido ocurrir semejante cosa? Fácilmente. De la misma manera que ocurrió con Mario Onaindía. La izquierda es, para ellos, una coartada que les permite hacer lo que quieren sin que nadie pueda acusarles de traidores, porque ellos, ya se sabe, son “independentistas”. Más nacionalistas que nadie. Y como son más nacionalistas que nadie, nadie puede sospechar que estén vendiendo Catalunya al PSOE. Si lo hace CiU, estaría contribuyendo a conformar, junto con el PSC, un sano “regionalismo centrista”. Pero ERC es independentista y lo puede hacer sin que de ello derive peligro alguno para Catalunya.
Las explicaciones que han dado los líderes de ERC para explicar esta maniobra, no tienen pérdida. Carod Rovira argumentaba en un artículo publicado el pasado sábado en EL PAIS (el órgano oficial del Gobierno del PSOE) que el acuerdo con el PSC tenía que ver con la idea de que “Para Esquerra, cohesión social y cohesión nacional no son sino dos caras de un mismo objetivo”. Y para los que no entienden la retórica enrevesada de algunos políticos, precisaba:
“Ni PSC, ni CiU, como ya se ha observado en el largo debate del Estatut y en sus programas, tienen voluntad de ir más allá del marco legal vigente. Nosotros seremos la garantía de su desarrollo máximo. Pero somos conscientes de que ni unos ni otros quieren ni han querido nunca la soberanía completa para nuestro país. Partiendo, pues, de las bases de bloque del horizonte nacional, prefijado en el techo estatutario, la elección tenía que poner acento en las cuestiones sociales”
Ya ven con qué descaro se puede defender una cosa y la contraria, si quien lo hace goza de cara suficiente. Veamos:
- Ellos votaron que No al Estatut, porque no era un instrumento adecuado para una nación como Catalunya. Sin embargo, como ya está aprobado y en vigor, arrinconan a CiU y pactan con el PSC argumentando que “la garantía de su desarrollo máximo” es ERC y sólo ERC. ¿No era previsible que un gobierno de coalición nacionalista hiciera un desarrollo estatutario más ambicioso? No porque la garantía de “su desarrollo máximo” es ERC y sólo ERC, que para eso es independentista.
- Ellos quieren la “soberanía completa” para Catalunya. Pero como ni CiU ni el PSC la desean, arrinconan a CiU, se olvidan de la soberanía completa y pactan con el PSC, poniendo el acento “en las cuestiones sociales”. En su intervención ante el Consell Nacional, Carod Rovira desarrollaba este argumento, haciendo notar que “ni CiU ni PSC disponen de un horizonte nacional que vaya más allá del Estatus que hay ahora, puesto que más allá de la autonomía no hay para ellos horizonte”. Por lo tanto, añadía, “tenemos que buscar las diferencias en otro lado, en las políticas sociales, y aquí sí que hay diferencias”. Por ello han optado por Montilla.
¿Significa esto que están perjudicando al nacionalismo catalán? No, evidentemente. Porque ellos son la garantía de que el nacionalismo catalán se mantendrá reivindicativo y en tensión. No en vano son independentistas. Por ello dice Carod Rovira que el pacto con el PSC no es una traición a la causa nacional catalana. En puridad, si pactan con el PSC, es para el bien del nacionalismo catalán, porque van a “reformular, desde la izquierda y desde los valores republicanos y democráticos, el discurso y las políticas del catalanismo”. ERC desea “un catalanismo renovado en sus discursos y en sus políticos. Más abierto, más inclusivo, más atractivo para aquellos que aún no se sienten partícipes”. Lo que están haciendo, pues, es por el bien de Catalunya. Una apuesta “en clave de futuro”, para cuyo éxito resultaba, al parecer, imprescindible, marginar al partido político que ganó las elecciones en todas las circunscripciones. Se va a reformular el catalanismo, sin contar con el principal partido de Catalunya. ¿Quién da más?
El mismo día, el diario EXPANSIÓN publicaba una entrevista con Joan Puigcercós. Sus respuestas son de traca. Cuando el entrevistador le pregunta sobre si Esquerra primará a partir de ahora el eje ideológico sobre el nacional, responde:
“Para Esquerra el eje nacional sólo, no tiene sentido, porque somos un partido de izquierdas. En Cataluña tenemos tres problemas muy graves: reconducir la deslocalización, que muchas son lógicas y comprensibles, pero que se pueden y se deben afrontar mejor, asumir la inmigración, con todo lo que implica, que es también una cuestión nacional y el problema de la gente joven, con el acceso a la vivienda. Con todo esto, era mejor un acuerdo progresista”
Si no lo entienden vuelvan a leer el fragmento, por favor. Probablemente seguirán sin entenderlo. Si es así, desistan. Es ininteligible. O, cuando menos, lo es en términos racionales. Puigcercós dice que han marginado al partido que ha ganado las elecciones…sólo para afrontar la deslocalización, la inmigración y el problema de la gente joven con el acceso a la vivienda. Increíble, pero cierto. ¿Era realmente necesario arrinconar a CiU para eso? ¿Cree, de verdad, Puigcercós, que en estos tres temas, que entroncan directamente con políticas que van a ser diseñadas en Madrid y en Bruselas, los planteamientos del tripartito van a ser esencialmente diferentes a los que defiende CiU? ¡Hace falta rostro! Si planteasen la nacionalización de la banca o de las empresas energéticas, vale. CiU no les hubiese acompañado, es evidente. Pero…en las políticas tendentes a frenar la deslocalización de empresas, facilitar la inmigración y promover el acceso de los jóvenes a la vivienda, lo cierto es que no van a ser capaces de diseñar políticas sociales que no puedan ser asumidas por CiU. ¿Es esa toda la apuesta social que les ha llevado al tripartito? ¡Menudas alforjas para tan poco viaje!
La operación es, como se ve, redonda. ERC se olvida de lo nacional, argumentando que “somos un partido de izquierda”, para centrase exclusivamente en lo social. Pero su planteamiento sobre lo social es tan Light que podría ser suscrito por cualquier partido de centro. Y en algunos casos, hasta por el PP. Fíjense.
Puigcercós afirma en la entrevista que quiere atraer multinacionales a Catalunya y, para ello, apuesta por las infraestructuras y la formación. Es decir, CiU en estado puro. Muestra también su preocupación por las normas fiscales y medioambientales, que “pueden perjudicar la competitividad en la economía catalana”. Nuevamente, CiU en estado puro. Y sobre las deducciones fiscales que Esperanza Aguirre está aplicando en la Comunidad de Madrid, asegura que “nos deben hacer reflexionar porque son un elemento competitivo que debe ser tenido en cuenta”. ¡Viva la política social! ¡Viva el tripartito y su voluntad progresista!
Y mientras tanto, ¿Qué ocurrirá con lo nacional?
Puigcercós nos decía hace unos meses en DEIA que “la única solución es reconocer el derecho a la autodeterminación o reconocer las naciones. Si no se reconoce que Euskadi es una nación, los vascos deberán exigir su derecho a la autodeterminación cuando una mayoría democrática y pacífica así lo permita”. Muy bien. Gracias por el consejo. Pero ahora, cuando le preguntan sobre si planteará o no el tema de la autodeterminación responde:
“Esquerra no piensa plantear un debate sobre la autodeterminación. Después de un proceso estatutario con tanto desgaste, lo que queremos hacer es desplegarlo desde el Gobierno, aunque lo votáramos en contra. Esa es una de las cosas que no debe plantear un Gobierno. Sobre el Estatus hay cosas que pensamos que son insuficientes, pero con el 15% de los votos no podemos imponer al resto del arco parlamentario una posición de fuerza”
Consejos vendo, que para mí no tengo. ERC, la suprema garantía de que la tensión nacional de Catalunya no fenecerá, aúpa al gobierno a un presidente del PSC, para hacer políticas que, bajo el título de progresistas, serán de centro o incluso estarán inspiradas en las de Esperanza Aguirre. Y sobre todo, NO PIENSA PLANTEAR UN DEBATE SOBRE LA AUTODETERMINACIÓN.
¿Se puede decir con esto, que es ella, ERC, la que tiende a ocupar ahora el espacio político “autonomista” que Pugcercós reprochaba a CiU para el supuesto de que pactase con el PSC? ¿O esa acusación vale para CiU, pero no vale para ERC?
En fin.
¿Alguien quería lecciones sobre lo ocurrido en Catalunya? Ahí las tiene. Carod y Puigcercós en vías de transformarse en Mario Oinandia. Lo mismo que harán los que todavía, en Euskadi, siguen afirmando que son independentistas y de izquierda. Al tiempo.
Bueno esto parece una confesión en toda regla. Gillermo me ha gustado mucho, creo que hay pocos que se sienten así como tu, significa que eres una persona autentica.
Como ex-afiliada al PNV, pensaba igual que tu pero últimamente he perdido ese entusiasmo en el ideario en JEL, ¿Por qué? Pues a lo mejor me he llevado muchas decepciones en este mundo tan complicado, como es la política y por otro lado, el compromisó dentro de un partido no es nada fácil terminas por llevarte muchos chascos y parece ser que de esos me he llevado bastantes.
Y llegas a un punto de tanta decepción dentro de tu compromiso político que empiezas a mirar otras prioridades en tu vida, que no sea el aportar tu tiempo en un ideario.
Te deseo suerte en tus labores de concejal en el Ayuntamiento de Durango, la necesitarás. En estos momentos por mi parte paso a una fase de parentesis en cuanto a compromiso político y seguimiento en el ideario en JEL en el que me daré mi tiempo.
Guillermo chapeau, admiro tu sinceridad, creo que personas como tu quedan pocas en el partido. Personalmente el único consejo que te puedo dar aunque no soy quién para darlos, es la de que no te fies de nadie, ni siquiera del que te dice que lo estás haciendo bien, porque te darán la puñalada por la espalda el día menos pensado.
Os deseo mucha suerte al PNV en estas elecciones, pero yo me bajo de este tren debe ser que ha llegado mi hora. Ojala que más políticos fueran igual de sinceros que tu.
Agurrak,
Publicado por: Nuria | 11/16/2006 en 06:30 p.m.
Sr. Anasagasti,
Estoy impresionado por su capacidad de exponer de forma tan clara las cosas. Hace días que multitud de bloggers que nos movemos por webs nacionalistas estamos intentando decir lo mismo que ha dicho usted, pero de momento no con resultados tan satisfactorios. Huelga decir que estoy totalmente de acuerdo con usted, y que ya hace días que en ambientes nacionalistas se escuchan comparaciones entre ERC i Euskadiko Ezquerra.
El objetivo de ERC con el renovado tripartito está claro. Lisa y llanamente, van a por CiU. El sueño ideal de Carod, Puigcercós y compañia sería que CiU se descompusiera por estar apartada del poder. Pero no sé porqué que me da que antes ellos serán absorvidos por la sucursal catalana del PSOE que CiU descomponerse. Eso si, puede que los nacionalistas nos tengamos que pasar una, dos, o incluso tres legislaturas en la oposición. Espero y deseo que sólo sea una.
Gracias por su brillante análisis.
Publicado por: Oriol de Mollerussa | 11/16/2006 en 07:31 p.m.
Mecaguenla.... tu no das muchas conferencias por ahi, verdad? lo digo porque los que votan deberina formarse e informarse antes de votar a iletrados como estos de Esquerra (por cierto, y en linea de tus argumentos, ERC ha pasado a llamarse simplemente Esquerra, dejando lo de Republicana y de Catalunya para mas adelante, para cuando seamos independientes...).
Gora Euskadi eta Visca Catalunya!
Publicado por: josep puigvert coll | 11/16/2006 en 11:42 p.m.
Desde Catalunya, felicidades, señor Anasagasti. Ya le digo ahora que en lo ideológico soy independentista catalán y social-liberal. En lo partidista, voto CiU.
Lo que ha hecho ERC me parece un paso más en su escalada destructiva de país y una puntilla más al deseable sistema propio de partidos catalanes. Ellos, en vez que ser coherentes(?) con sus postulados (?), hace tiempo que renunciaron a crear una izquierda nacional, buscando hacer agujero en el espacio de "izquierdas" donde el PSC campa a sus anchas. En cambio, su obsesión es destruir a CiU (que ya ocupa en clave nacional catalana buena parte del centro y centro-derecha), para así intentar arrambar con algo de lo que quede de ella el día después de su muerte. Una visión de la política bien sectaria, nula y estúpida. Porque los intentos de acabar con CiU ya duran muchos años y han demostrado que en contra de lo que predicaba la 'gauche caviar' del PSC-PSOE, aquí CiU tiene significado con y sin Pujol. Ni eso entienden, por su sectarismo, por su obsesión anticiu y por una gran incapacidad intelectual y política que les lleva a asumir la demagogia socialista, como buenos acomplejados que son.
Si no le importa, en breve reproduciremos este post suyo en un blog que hacemos junto con dos amigos patriota catalanes.
Un abrazo!
Visca Catlaunya!
Gora Euskal Erria!
Publicado por: Pere Garrigosa | 11/17/2006 en 11:45 a.m.
Sensacional. Brillante. Perfecto.
Sólo te falta un detalle: la supervivencia política de Carod y de Montilla dependía de repetir el tripartito, después de que cada uno perdiera el 24% de sus votantes anteriores. Que se dice pronto. Con el tripi queda todo enmascarado. Genial.
Publicado por: Ramon Gomà Seguí | 11/17/2006 en 02:22 p.m.
Sr. Anasagasti,
felicidades por su análisis.
Si la política fuera como el fútbol, me gustaría que aqui en Catalunya le ficháramos a Vd y a algún otro de su partido. De otra manera nos irian las cosas.
Leí su libro "Agur Aznar" y más recientemente "Así Fue" de Xabier Arzalluz, y les envidio a los dos la coherencia en sus planteamientos, y decir las cosas claras, cosa que falta en Catalunya. A ustedes los españoles les respetan, mientras que a nosotros nos toman por el pito del sereno. Supongo que parte de su valentía se debe al Concierto Económico, que nosotros hemos reclamado sin éxito.
Gora Euskadi
Visca Catalunya Lliure
Publicado por: Romà | 11/17/2006 en 03:41 p.m.
le felicito Sr. Anasagasti por este brillante artículo en consonancia con todos los que Vd. escribe. Es un placer poder leerlo y éste más, pues soy afín a ciu. Muchas gracias
Publicado por: carme | 11/17/2006 en 05:27 p.m.
Brillante, lúcido como pocos, no puedo dejar de buscar adjetivos xomo los mencionados a su artículo. Me lo ha pasado un familiar y es sin duda de los mejores artículos sobre política que he leido en internet.
Gracias y no deje de escribir !
Saludos desde Barcelona.
Atticus
Publicado por: Atticus | 11/17/2006 en 06:55 p.m.
Yo soy simpatizante de ERC (Esquerra y no Ezquerra) y estoy muy contento con el nuevo pacto de gobierno. Entiendo que desde fuera y con son simpatías ideológicas con CiU la decisión de Esquerra pueda resultar antipática y perjudicial pero creo que como muy bien dice usted en su escrito “al tiempo”.
Yo apostaría lo que fuera a que nunca jamás Esquerra va a tomar el camino de Euskadiko Eskerra, decir eso es desconocer TODO el mapa político catalán y su historia reciente. Mario Onainda se parece a Carod Rovira como un huevo a una castaña
CyU es una coalición regionalista de centro derecha que jugaba a la ambigüedad permanente con una bandera catalana descolorida.
No es que ERC quiera ir de radical pero es que es verdad, ERC es independentista y lo dice en Barcelona y en Madrid y CyU y el PSC no lo son. Pactar con uno de los dos no es renunciar a nada en el tema nacional porque el nacionalismo no independentista no tiene ningún sentido para nosotros. Yo soy independentista pero prefiero mil veces a un español federalista socialista que uno que se reclama nacionalista catalán pero que renuncia explícitamente a crear un Estado catalán independiente y se conforma en seguir siendo una comunidad autónoma (que toca mucho los cojones con su “fet diferencial”).
La campaña mounstrosa que lleva haciendo convergencia desde los últimos 4 años (cuando las encuestas ya vaticinaban la gran subida republicana) ha dinamitado muchos puentes de dialogo entre las dos fuerzas “oficialmente” nacionalistas.
Yo personalmente, hoy por hoy, desprecio profundamente a CyU y prefiero ver al insulso montilla como presidente que al crápula de Mas.
Salut i republika
Publicado por: RUFUS | 11/17/2006 en 08:59 p.m.
Ahí las tiene. Carod y Puigcercós en vías de transformarse en Mario Oinandia.--> Pura demagogia.
Afortunadamente yo diria que todos sabemos que ni tu mismo te cees lo que has escrito. Por ejemplo, sabes perfectamente que ERC no se olvida de lo nacional. De hecho, incluso en tu post ya dices que propone ERC en lo nacional: Desarrollar al máximo el estatuto (lo mismo que proponen PSC y CIU) y cuando tenga suficientes votos proponer la indepedencia (en las frases de Puigcecós no se renuncia a nada!).
Publicado por: Siso | 11/17/2006 en 10:55 p.m.
Por cierto, josep, ERC se sigue llamando Esquerra Republicana de Catalunya. Es solo el logo que ha cambiado. O es que Convergencia i Unió se llaman realmente CIU? Madre mia...
Publicado por: Siso | 11/17/2006 en 10:57 p.m.
Le tenía por menos demagogo.
Visca Catalunya Lliure!
Publicado por: jordi | 11/18/2006 en 12:16 a.m.
somos un colectivo de militantes de Unió con web propia:
www.elmati.cat
quisiéramos reproducir una buena parte de su análisis, que nos parece especialmente clarificador, y la presente es para solicitar su permiso
Publicado por: Joan Capdevila | 11/18/2006 en 09:33 a.m.
Fantástico el articulo Sr.Anasagasti!.A pesar de que estuve votando a ERC desde 1993 hasta el 2003 en todas las contiendas electorales, comparto plenamente su análisis respecto al futuro d'ERC.Los de ERC, al contrario de lo que dicen algunos de sus dirigentes, no quiere quitar votos al PSC i a ICV(cuantos votos les ha quitado en las pasadas autonómicas catalanas?) i convertirse, a la larga, en el referente de la izquierda catalanista sino lo que pretende es acabar con CiU y devolverles la pelota de lo que pasó en los años 80.
Publicado por: Marc Aloy del Pla d'Urgell (Lleida) | 11/18/2006 en 06:14 p.m.
Chapeau, sr. Anasagasti!
Mejor (argumentado), imposible.
Con su permiso, y obviamente citando la fuente, publicaremos este artículo en nuestro blog www.cimeraextra.blogspot.com, una humilde tribuna que pretende analizar y debatir acerca de la realidad política de Catalunya. Le invitamos a participar del debate, voces autorizadas como la suya son siempre necesarias, más aún cuando la acción de muchos de nuestros dirigentes viene determinada por el estómago (odio), y no por la cabeza (razón) o el corazón (amor).
Salut!
Publicado por: Amic Mestres | 11/18/2006 en 08:52 p.m.
Anasagasti,tiene toda la razón. ERC ja és un apéndice del PSC-PSOE. Para ellos ya no existe el nacionalismo ni la nación, solo el poder y haran el contursionismo idiológico necesario para justificarlo. Pero como toda tolerancia tiene un limite, espero que buena parte de sus bases de revelaran. La història de ERC no puede despreciarse tan facilmente sin pagarlo.
Gracias por su analisis
Publicado por: Kim | 11/18/2006 en 08:53 p.m.
Pocas veces se disfruta tanto leyendo una opinión fundamentada y bien defendida. Gracias Sr Anasagasti!.
En sus comentarios queda claro que no es nada fácil entender lo que pasa en Catalunya. Cuando un partido es capaz de argumentar de forma contradictoria sus planteamientos básicos es que no tiene otro planteamiento que el poder al precio que sea. Incluso traicionando a sus votantes. Es legítima la aspiración de disputar un espacio político a otro partido, para esto estan los partidos políticos. Pero cuando se substituye una opción legítima por una actuación como la de ERC lo único que se logra es el desinterés, el absentismo político en la mayoria.
Publicado por: joan ant sospedra (el vendrell) | 11/18/2006 en 09:22 p.m.
Sr. Anasagasti, no comparto su ideario, ni mucho menos el de ERC, pero me da la impresión de que usted está profundamente dolido con Puigcercós. ¿Tiene algo que ver el que dijera en su día que usted no habla el euskera?
Agur.
Publicado por: Campmany | 11/18/2006 en 10:14 p.m.
No sabe como les envidio.
Si viviera en Euskadi lo tendría clarísimo a la hora de votar, ya me gustaría a mí tener algún político de la talla de Ibarretxe o Arzallus. De momento en las últimas elecciones me he tapado la nariz y he votado a CiU. Tal como se ha comportado ERC, las próximas elecciones ya lo podré hacer sin taparme la nariz.
Nosotros no tenemos ningún sindicato nacionalista, otro motivo de envidia.
El tema de la lengua es otro. Por mi afición ciclista tengo bastante contacto con vascos. Me admira el esfuerzo que hacen para hablar euskera y resucitar esta bella lengua. En cambio nosotros enseguida dimitimos y lo tenemos mucho más fácil. A los que como yo no bajamos del burro fácilmente, lo mínimo que nos llaman es intransigentes. Parece que tengamos un extraño complejo y debamos ir por la vida dando explicaciones y pidiendo perdón.
Son pequeños ejemplos de porqué a ustedes los respetan y a nosotros nos toman por el pito del sereno. Tenemos lo que nos merecemos. Ustedes sí que son una nación, nosotros no, por un motivo: Nos falta la voluntad de serlo.
Publicado por: Francesc Junyent (Barcelona) | 11/18/2006 en 10:42 p.m.
Me parece un buén anàlisis. Noto a faltar el análisis que el PNV podia haber hecho sobre el Estatut de Catalunya que solo Xavier Arzalluz se atrevió a hacer, desmarcándose de CiU. De esas lluvias tenemos estos lodos. CiU y ERC cada vez más lejos grácias a ZP.
Al PNV ya le va bién el Estatut catalán que ya se sabe que lo que se le da a Catalunya todas lo quieren, y así nos va. Algún dia las tornas se les pueden girar, Catalunya va a dejar de ser expoliable (por ya exprimida) y ya van los primeros ustedes, las voces de la insolidaridad del concierto crecen. En lugar de hacerlo un modelo exclusivo y solo suyo, exportenlo como modelo de éxito, por favor.
Publicado por: Jaume Planas | 11/18/2006 en 10:45 p.m.
Ya se ve a todos los hooligans de CyU que han linkado su artículo escribiendo por aquí.
Vaya, por qué no publica en su blog su mítica entrevista en AVUI que decía que Artur Mas era un político de laboratorio y poco menos que un traidor. De eso no hace tanto señor Anasagasti. A ver qué dicen entonces los amigos de CyU.
Estoy plenamente convencido que no censurará este comentario. Gracias por su blog, ilustrativo de algunas tendencias del PNV.
Publicado por: Arnau Mir de Tost | 11/18/2006 en 10:48 p.m.
Señor Anasagasti, le tenia a usted por una persona más inteligente, seguramente lo será, però lo que ha escrito, es de alguién o muy muy demagogo o que no se entera de lo que pasa en Catalunya, primero: Que CiU sea nacionalista està por ver, que sus votantes són nacionalistas seguro. Segundo: CiU no tiene nada que ver con el PNV, si fueran como ustedes, el pacto CIU-ESQUERRA, estaria hecho hace años. Tercero, CiU cuando puede pactar con el PP, pacta sin escrúpulos, són sus aliados naturales. A la gente d'Esquerra, no nos gusta pactar con el PSC, però no hay más remedio, hoy por hoy, es imposible pactar con Unió, por cierto, un partido donde hay constantes trasvases de dirigentes entre PP y Unió, por ejemplo Millo de Girona, solo por citar alguno, creo que los trasvases de militantes a Esquerra, solo són del sector sobiranista de Convergència, tipo Esteve, y o creo que dirigentes d'Esquerra se hayan integrado a otro partido, Esquerra tiene 125 alcaldes, 1.300 concejales, etc, no nos compare con otros partidos, que aunque muy respetables, no tenian nuestra implantación. Sr Anasagasti, espero que reflexione, y piense que con la campaña que lleva haciendo estos 3 años CIU contra Esquerra, podemos pactar con ellos, lea el titular del periódico de Catalunya del 27 de octubre de 2006, del Sr. Duran, y digame si se puede pactar con CiU.
Salut
Gora Euskadi
Visca Catalunya Lliure
Publicado por: carles | 11/19/2006 en 05:32 a.m.
Me parece muy lúcido su analisis.
Lo que ha sucedido en Catalunya solo puede imaginarse en una versión barata de Harry Potter. Los más nacionalistas de todos estan convirtiendo Catalunya en un parque temàtico, sin experimentar el rubor. Realmente es un fenómeno paranormal.
Publicado por: Dessmond | 11/19/2006 en 10:21 a.m.
Molt bona reflexió.
Unos y otros podran decir lo que quieran, pero es obvio que los militantes y votantes de ERC (yo lo soy) deberían reconocer las grandes verdades subrayadas por el señor Anasagasti. Yo lo hago. No sé a dónde va ERC, pero si que creo que su arrogancia y prepotencia la va a llevar por el mismo camino que a quien quiere hundir: a un mal resultado electoral.
Salutacions cordials.
Publicado por: Jaume | 11/19/2006 en 10:50 a.m.
Señor Anasagasti, expliqueme que tiene que ver un partido indpendentista y de izquierdas (ERC) con uno de derechas y regionalista como CiU?Donde unos van a por la independencia de Catalunya y los otros no.
Estoy totalmente de acuerdo con lo que ha escrito Rufus.
Publicado por: larga vida al tripartito | 11/19/2006 en 03:01 p.m.