La mayoría de ustedes eran apenas unos niños cuando Chávez asumió el poder y les ha tocado crecer en una atmósfera de constante incertidumbre. Incertidumbre acerca de un futuro posible para ejercer una profesión, formar un hogar, transitar libremente, sin temor y todas esas cosas que anhelamos cuando comenzamos a abrirnos camino en la vida. Estos últimos nueve años no han sido nada fáciles para ustedes. Han estado sometidos a mucha presión. Hoy, quiero expresarles mi respeto y admiración por ejercer un liderazgo tan auténtico, firme, diáfano. Están pisando fuerte y su voz es hoy nuestra voz. Nos están dando una gran lección a todos y espero que en los próximos días lo sigan haciendo.
Estamos viviendo el momento más difícil de la historia reciente y ustedes salen a la calle a expresar su intención de generar un cambio positivo para el país con la mirada en alto, como solo puede hacerlo quien juega limpio. Y es el juego limpio el camino correcto, aunque también el más tortuoso. La madurez y afectividad fluye de ustedes con tanta naturalidad que tienen a los representantes del actual Gobierno totalmente desconcertados. No han podido desarticularlos como pudieron con nosotros. Tal y como Chávez decía unos pocos años atrás nuestra oposición "no era una oposición seria", en esto le doy toda la razón. Sin embargo, ustedes sí representan una "oposición seria", no le piden que se vaya, no asumen una posición polarizada, simplemente le piden que gobierne para todos por igual y que lo haga respetando los derechos y las libertades del colectivo nacional. Y lo que hoy piden es sencillamente, más tiempo para que el pueblo pueda conocer a fondo el proyecto de "Reforma Constitucional" y acuda a votar de forma más consciente... no piden que se suspenda la consulta, no apoyan el abstencionismo. Este es un escenario difícil de manejar por el Gobierno, pues ustedes no le siguen el juego de restar y dividir... ustedes juegan a multiplicar y a sumar.
Por esta razón hoy son objeto de tan duros ataques y se les quiere desacreditar y criminalizar. Es por ello que han visto morir a varios de sus compañeros. La respuesta de los representantes del Gobierno hacia sus acciones tiene como objeto atemorizarlos, desmoralizarlos y forzarlos a tomar el camino de la violencia. Y el Gobierno bien sabe capitalizar la violencia y sacar provecho de ella. Yo creo en ustedes, en su liderazgo, en el ejemplo que están dando. Es por ello que me atrevo a pedirles lo siguiente:
Si perciben la posibilidad de incidentes violentos, aléjense, no los faciliten. Cuídense mucho.
A la hora de ejercer las acciones de calle, no diversifiquen sus protestas pues esto debilitará la lucha. Mantengan el foco en sus demandas y solicitudes. Los graves eventos de los que han sido testigos y víctimas tienen como finalidad dispersar la atención en el objetivo más importante: Una Venezuela para todos, libre y democrática.
En relación a los hechos de violencia, las muertes y las descalificaciones, procesen todos y cada uno de ellos y ejerzan las acciones que consideren pertinentes pero de forma separada a la lucha que lideran. La prioridad hoy es lograr abrir espacios al respeto de los derechos fundamentales de todos los venezolanos. No olviden que si no lo logramos, seremos testigos y víctimas de aún más violencia e injusticia.
Mantengan en su agenda la lucha contra la abstención pues es ésta el peor enemigo de la democracia.
Continúen firmes en su línea de acción y sigan ejerciendo ese liderazgo genuino. Una importante porción de la población los admira y los respeta. Ustedes están señalando el camino a seguir. Mantengan su norte.
Gracias por ser como son.
Illargi Uzcanga
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