Andrea Canino / Benita Ferrero-Waldner
Gracias a los esfuerzos del presidente Van Rompuy y de la Comisión Europea, así como a las concesiones del Gobierno alemán, la pasada cumbre de la zona euro del 11 de marzo de 2011 estableció un dispositivo adecuado para tratar la crisis de la deuda pública. Sin embargo, el peligro de una nueva crisis no es ajeno a este progreso, dada la asfixia financiera de las pequeñas y medianas empresas de los países periféricos de la eurozona. Representando el 95% del tejido industrial de estos países, la agravación de su situación tendría repercusiones negativas que producirían un efecto dominó en tres etapas sobre el conjunto de los países de la Unión Europea.
Urge un dispositivo europeo de garantía de créditos para evitar el colapso de pequeñas y medianas empresas
No obstante, existe una solución simple y ya utilizada, en Francia como en Alemania, para evitar esta nueva crisis. La única condición es que se encuentre voluntad política para actuar rápidamente.
Desgraciadamente, la primera fase de este dominó ya ha empezado con la reducción de créditos a las empresas a causa de la actual crisis. La falta de liquidez ejerce una presión muy fuerte sobre las pymes que deben negociar por un financiamiento escaso o a condiciones inaceptables. En 2010, los gastos de financiamiento para las pymes han aumentado un 69% en España, un 56% en Portugal y un 44% en Italia. Si esta situación insostenible no cambia, un gran número de pymes sanas se tornarán insolventes y desaparecerán.
En un segundo tiempo, las pymes insolventes se encontrarán en la imposibilidad de pagar a sus proveedores y los salarios de sus empleados, provocando inevitablemente un círculo vicioso de reducción del consumo, paro y nuevas quiebras. Las tasas de desempleo pueden alcanzar niveles sin precedentes: más de un 25% en España, 20% en Grecia e Irlanda o un 15% en
Portugal; es decir, un aumento de dos millones de parados para estos cuatro países.
Al mismo tiempo, el descenso de recaudación fiscal incrementará la deuda y hará inevitable una restructuración de las deudas públicas.
Con motivo del imbricado sistema de relaciones de los países de la zona euro, el efecto dominó se expandirá a los otros países europeos. El sistema bancario europeo es el principal titular de la deuda de los países periféricos con alrededor de 149.000 millones de euros (o sea, un 61% del total). Francia y Alemania, con 61.000 y 45.000 millones de esta respectivamente, son los países más expuestos. En el peor de los escenarios posibles podrían tener pérdidas de hasta un 1% de su PIB, impactando al mismo tiempo y sin excepción al resto de las economías.
Las medidas acordadas recientemente para socorrer la deuda pública no son pertinentes para ayudar a las pymes de los países periféricos que, siendo intrínsecamente sanas, sufren de problemas de los cuales no son responsables. Además, los sistemas de garantía establecidos por ciertos Estados son claramente insuficientes para resolver sus problemas de financiamiento. La única solución para evitar este efecto dominó sería introducir un "dispositivo europeo de garantía de créditos a las pymes" permitiendo la emisión de obligaciones garantizadas en los mercados financieros europeos a los bancos, de modo que puedan de nuevo restablecer el financiamiento a las pymes.
Este nuevo dispositivo debería ser gestionado por una agencia provisional de la eurozona cuyo mandato estaría limitado a dos o tres años como máximo. Las contribuciones a este fondo de garantía deberían provenir de fondos europeos y de una cuota de los países miembros.
La agencia debería asignar garantías según las notaciones internas a los préstamos establecidas por los propios bancos, por un lado, y, por otro, en función de certificados de agencias de calificación.
Finalmente, este dispositivo tendrá que garantizar inicialmente una deuda de 100.000 millones de euros; cifra que corresponde a los fondos necesitados por las pymes de los países periféricos.
Es importante que el Consejo Europeo de los días 24 y 25 de marzo requiera a la Comisión el estudio de la introducción del dispositivo propuesto y, más particularmente, la tipificación de las garantías.
Ofrecer garantías es el camino para que los mercados continúen prestando a los bancos de los países periféricos y que estos a su tiempo puedan acordar préstamos a las pymes.
Andrea Canino es presidente del Consejo de Cooperación Económica. Benita Ferrero-Waldner fue comisaria europea de Relaciones Exteriores y de Comercio.
No he encontrado nada en el documento sobre como poner los frenos a la avaricia de los banqueros. Nada sobre como tasar los bonos millonarios que se pagan los banqueros a si mismos. Nada, en definitiva, que vaya a avitar la repeticion de una crisis igual.
Como es posible que bancos que han tenido que ser rescatados a costa del erario publico, sigan haciendo perdidas pero los directivos sigan pagandose bonos millonarios? Este ha sido el caso del Banco Ingles Northen Rock.
O como es posible que Barclays, un banco que se libro del rescate publico, pero se beneficio pues sino hubiese sido el siguiente en necesitar en rescate billonario, como es posible que solo tenga que pagar en impuestos un1% de sus beneficios, permitiendosele legalmente sifonar todos sus beneficios a la Isla Caiman?
O como es posible que a Fred Goodwin, directivo de Royal Bank of Scotland, cuya nefasta gestion puso de rodillas al banco central mas antiguo del planeta, The Bank of England, ( algo que ni Hitler durante 6 años de guerra pudo hacer, este banquero lo hizo solo) se le tenga que pagar un compensacion millonaria para que deje el puesto, y para que no parezca que se le ha echado injustamente?
La respuesta a estas preguntas es: porque pueden. No hay consequencias para estos banqueros. Luego porque habrian de cambiar su actitud, cuando les va tan bien?
Mientras no haya mecanismos para dejar fuera de juego a banqueros sin ningun otro talento discernible que el de la avaricia y la habilidad para firmar cheques gordos, pueden escribir en Europa todos los documentos que les de la gana. No serviran para nada.
Publicado por: txilinasti | 03/26/2011 en 09:11 a.m.
Pues yo soy pesimista.... El exceso de credito es colosal, y va a convertirse en un agujero negro del que nadie pude escapar !
Arzalluz hablaba de los "fastos de 1992" cuando en el 93 y 94 la economia renqueaba.... pues me da que aquello son "penauts" comparado con la orgia de cemento que ha traido el Euro.
Y Europa, como quedara ?
Publicado por: takolo3 | 03/26/2011 en 10:12 a.m.
Desgraciadamente es así y un hueso duro de roer.
Detras de ese poder bancario, obviamente siguen el político, judicial, social, etc.
Publicado por: Juan Rua | 03/26/2011 en 01:15 p.m.
¡Qué razón tienes txilinasti!
Europa tiene que adelgazar en un gran tanto por ciento el número de funcionarios en los diversos niveles de poder, y conseguir involucrar a los bancos en el desarrollo real. Ya que las riquezas de los bancos provienen de todos nosotros, y de la tolerancia de todos los gobiernos, debería obligárseles por ley a invertir un tanto por ciento elevadísimo de sus beneficios en fomentar el desarrollo, además de establecer por ley límites a los sueldos de los directivos.
Publicado por: Conrado Montalbán | 03/26/2011 en 07:20 p.m.
En los años noventa, cuando todos parecían querer una grande y libre Europa, intentaron algunos (franchutes y belgafranchutes más que nadie) crear el ECU, que iba a ser la moneda única. Nunca se acuñó monedas ni billetes, salvo unos cuantos billetes de 10 ECU's que vendían en la Expo de Sevilla como helados (tengo algunos). Alemania estaba en contra y España ni podía pensar en esos carriles por la grave crisis que padecían (que raro, bajo el régimen del PSOE).
Vino el EURO, esta vez los alemanes podían decidir el nombre. Los primeros Euros "en prueba" en 1998 en Churriana, donde compré 3 bolsas como souvenir. Cual fue el craso error de Alemania?, creer que los países sub-alpinos (e Irlanda) iban a cumplir sus deberes, y que no iban a hacer trampas, corruptelas y actuar con dolo económico. El Euro podrá seguir existiendo, pero quizás sea necesario prescindir de países como España, Italia, Portugal, Irlanda, Grecia.
La crisis en Europa la escriben los países sub-alpinos. El Euro triunfaría si hicieran un pacto entre países germanos (incluyendo la parte flamske de bélgica), quedando así el euro vinculado a Pangermania. España podría crea entonces su nueva moneda conjuntamente con los otros en discordia, a razón de, 1664LIR (lira) = 1EUR
CJota.
Publicado por: Christian Johansen | 03/26/2011 en 09:53 p.m.
Cejota.
Podiás decir todas esas bobadas en tu casa y así entre bobos andaría el cuento.
PD. España y Portugal no son estados subalpinos, ignorante.
Publicado por: Juan Rua | 03/27/2011 en 04:26 p.m.
Pues el Euro no es mas que la voluntad de F. Mitterrand que forzo a canciller aleman Khol a que aceptara el Euro a cambio que europa aceptara la reunificacion alemana.
Asi de sencillo.
Publicado por: takolo3 | 03/27/2011 en 06:48 p.m.
Sí Juan, los países sub-alpinos son los llamados GISP en escandinavo, o PIGS en inglés (grecia, italia, españa y portugal).
CJota.
Publicado por: Christian Johansen | 03/28/2011 en 03:31 p.m.
CEJOTA
La Geografía y la Antropología dicen que no.
La opinión de cierta prensa mercenaria o la de los ignorantes que la obedecen, no tiene valor.-
Publicado por: Juan Rua | 03/29/2011 en 12:28 a.m.