Por la mañana estuvieron en ETB. Uno se vistió de Simón Bolívar y leyó una soflama. No dijo aquello de Bolívar de que había que desconfiar de aquella persona que se perpetuaba en el poder. Y Chávez lleva catorce y con la vista puesta en consumar los veinte años, si la salud se lo permite. Para ello cambió la constitución. Es un autócrata.
ETB les ha dado su espacio. Ya quisiera la oposición venezolana en Euzkadi que EITB les tratara igual.
A la tarde-noche se han concentrado en la Plaza Circular de Bilbao. Les apoyaba a tope la IA y varios movimientos marginales. No llegaban a 68 los congregados. Lo que se dice en el argot coloquial: cuatro gatos bolivarianos. Sin más.
Chávez y los chavistas están nerviosos. Ven que la diferencia entre Capriles y el militar se ahonda de día en día y que no van a poder hacer ninguna chapuza maniobrera de falsificación de datos. Hasta Brasil les ha dicho que ojo al parche. Si a esto se le une la enfermedad de Chávez, su prédica continua del odio, su desprecio al adversario, su manipulación de los medios, la coacción que ejerce contra quien discrepa, la inseguridad ciudadana, la presencia agobiante del régimen cubano, los parches a una economía exhausta, la cutrez del personaje, y la campaña en positivo de Capriles junto al cansancio de la ciudadanía auguran un éxito de la oposición que ha tenido la virtud, por primera vez, de unirse contra el golpista militar de 1992.
El domingo 7 de octubre serán las elecciones. En Bilbao serán las votaciones en el consulado, Campo de Volantin 24. Hay que estar inscrito y llevar la cédula de identidad.
La Fundación Konrad Adenauer ha hecho el siguiente análisis de situación:
Por lo que está ocurriendo en mi país que es España, me siento avergonzado de ser español.
Publicado por: Leo | 10/04/2012 en 01:55 p.m.