Martes 9 de febrero de 2016
SPRINT FINAL
El miércoles 24 fui invitado al programa de TVE “Los Desayunos”. Me preguntaron por el voto. Dije que en ese momento votaríamos NO. Y culpamos a los sindicatos. Se organizó un buen follón. Aznar llamó a Arzalluz. El asunto quedó abierto pero en ese momento primaba el NO. No era de recibo que una presión sindical impidiera un acuerdo que se basaba en el cumplimiento de una ley. Mayor Oreja me llamó y me dijo que habíamos empezado la negociación en cabeza y acabábamos en la cola. Le dije que la responsabilidad era de ellos por no tener coraje de enfrentarse a CC. OO. y UGT. Ellos eran el centro derecha. Pero Oreja era persistente. Quería el acuerdo y me anunció una nueva redacción. Había hablado con el asesor de Ardanza, Zubizarreta, y buscaban alguna fórmula.
Nos reunimos el lehendakari Ardanza, el vicelehendakari Ibarretxe, Arzalluz, Egibar y yo. Llegamos a la conclusión de que no había nada que hacer. El PP prefería a los sindicatos que al PNV. Me tocó ir al informativo de ETB. Empezamos a preparar el terreno para el NO. Almorcé con Jesús González Mateo, de Europa Press. Había hablado con Molins. “Sois distintos. Ellos tienen una Delegación en Madrid y vosotros en Bruselas. Ellos quieren puestos y vosotros tenéis el piñón fijo del Estatuto”, me comentó. “Ellos determinan si gobierna el PP o el PSOE, por eso somos distintos, pero yo te aseguro que nosotros con esa fuerza conseguiríamos sacar el Estatuto de Gernika”, le contesté.
Me comentó que Álvarez Cascos decía que era partidario de un acuerdo de legislatura o nada porque de lo contrario un SI a la Investidura salía demasiado caro. El PP, resumidamente, quería el PER, TVE y La Moncloa. Al PP no le gustaba que le propusiéramos a Olabarría para el Consejo General del Poder Judicial y a Ibarretxe no le tenían demasiada simpatía porque en la negociación sabía mucho más que ellos.
Le comenté que Molins me había dicho una cosa interesante y bastante esclarecedora del ritmo de aquella negociación. CiU no deseaba que el PNV llegara a ningún acuerdo con el PP antes que ellos porque los dejaba en evidencia y les hacíamos una gran faena. En el fondo, todos negociaban igual. El PSOE y el PP. Cada cual iba a lo suyo. Y una vez más iban a dejar pasar el tren del PNV por pura mezquindad estirando malamente la negociación y haciendo más caso a los sindicatos que a la ley.
El jueves 25, hartos de aquella negociación, convocamos una rueda de prensa. La di con Arzalluz y Olabarría para replicar a los sindicatos UGT y CC. OO. y anunciar el bloqueo de la situación. Aquello encendió las luces rojas del despacho de Mayor Oreja, que se dedicó a llamar a diversos dirigentes del PNV para buscar una solución. De ahí que propiciáramos una reunión en Madrid de Ibarretxe con Mayor Oreja, donde hablaron de una nueva redacción de la propuesta. Ibarretxe asimismo participó en un programa de televisión sobre financiación autonómica. La pelota estaba ya en el punto de penalty. La reunión entre Ibarretxe y Mayor Oreja había durado hasta las dos de la madrugada. A la vuelta, Ibarretxe preparó varias fórmulas de acuerdos. Se las remitió al lehendakari Ardanza, quien nos las mandó ese viernes al EBB, que estaba reunido ya que el lunes siguiente era San Prudencio.
En el EBB el clima era de total rechazo a cualquier tipo de acuerdo con el PP. Se decía que de seguir así íbamos a pasar a una situación mendicante. Arzalluz recondujo la situación leyendo la nota de Ibarretxe, que fue aprobada. La envió a Ardanza y a Ibarretxe, que estaba en Madrid. La nota era sustancialmente la misma que la enviada el lunes 22 aunque se habían cambiado algunas cuestiones. Fue Arzalluz el más partidario del pacto. De no haber sido por él de aquella reunión habría salido un NO como una casa.
El fin de semana se produjeron decenas de llamadas de tal forma que el camino estaba ya muy trillado cuando el lunes 29 se reunieron, en el restaurante Landa, el vicelehendakari Ibarretxe y Jaime Mayor Oreja. Entre los dos llegaron al acuerdo definitivo y por fin se anunció que el PNV apoyaría la Investidura de José María Aznar como presidente del gobierno español. Actualización del Concierto Económico, apoyo a la Formación Continua y devolución del patrimonio incautado con motivo de la guerra eran el meollo del SÍ. Junto a esto se decía que a medida que fuera transcurriendo la legislatura se procedería al desarrollo estatutario con el criterio que todos los grupos del Parlamento vasco habían decidido a la hora de cumplir el Estatuto. Era un buen texto para un solo SÍ. Abría un camino que estaba en la mano del PP y nosotros obraríamos en consecuencia. Ibarretxe, de allí, se fue de vacaciones con su familia a París.
Y SE PRODUJO EL ACUERDO
Tras éste me llamó Mayor Oreja. Estaba feliz. Quería que viniera todo el PP a Bilbao como habían hecho con los catalanes. Le dije que preferíamos ir nosotros a Madrid. “¿En qué hotel?”, me preguntó. “No. En vuestra sede”, le dije. No se lo terminaba de creer porque toda la obsesión de CiU había consistido en que el PP fuera a Barcelona, poco menos que a inclinar la cerviz, en el hotel Mayestic. Sin embargo, el montaraz PNV lo quería hacer nada menos que en la sede del PP. “Yo por ir a la sede del PP no voy a dejar de ser nacionalista vasco. No tengo complejo alguno”, le contesté.
LA MANO EN LA CARPETA VERDE
El martes 30 de abril salíamos Arzalluz y yo hacia Madrid rumbo a la sede del PP, Génova, 13. La expectación era inusitada. Subimos al despacho de Aznar. Allí estaba con Rato, Rajoy y Mayor Oreja. Hablamos del acuerdo y de sus partes. Había una cláusula secreta a petición de Aznar. Habíamos llegado al acuerdo sobre el segundo operador de telefonía, Euskaltel, y el PP no quería que esto se supiera porque CiU les iba a pedir a ellos lo mismo. Y allí estaba. Pero Arzalluz quería que Aznar firmara el documento. Éste le preguntó si no se fiaba de él. “Sí, pero me fío más si firmas”, le contestó Arzalluz. “Pero bueno, ¿vosotros no habláis siempre de la palabra de vasco?”, y diciendo esto puso su mano sobre la carpetilla verde. Con ese gesto daba por firmado el documento.
En aquel séptimo piso, los dirigentes del PP nos comentaron lo complicado de nuestra organización, los mítines de los fines de semana, la labor diaria. Ellos, nos decían, que por haber tenido un partido con listas abiertas casi se quedan sin organización en 1986. “Es terrible cuando la gente hace propaganda en la prensa para lograr un cargo interno”.
Y con las mismas, a la planta baja, a una rueda de prensa que estaba de bote en bote. Con las gaviotas del PP detrás. Un periodista le preguntó a Arzalluz si sabía dónde estaba. “Por supuesto. Esto de aquí detrás son las gaviotas del PP y este edificio la sede del PP en la calle Génova, 13. ¿No es así? ¿Usted cree que yo no sé con quién estoy pactando?” Trece cámaras de televisión y una rueda de prensa de una hora. Arzalluz utilizó su contrastada capacidad didáctica para explicar el acuerdo. Dijo que había tenido especial interés en que se hiciera público. Al final, el PP accedió. “No hay nada mejor que la transparencia, que la gente lo sepa por si alguien lo incumple”. Al no haber firma, la prensa actuaría como BOE.
Contestó asimismo en euskera. Seguramente sería aquélla la primera vez, y quizá la última que en aquella sala resonara el euskera. La imagen era increíble y, hoy, impensable. Los dos en la sede del PP. Arzalluz hablando en euskera de acuerdos con Aznar en su propia casa. Impactante e insólito.
Subimos de nuevo al despacho de Aznar. Firmaba cartas. Nos enseñó la sede. Es todo un edificio aunque es mucho mejor Sabin Etxea. “Seguro que cuando veas Sabin Etxea y degustes nuestras exquisiteces -le dijo Arzalluz a Aznar- te gustará más el nuestro y comenzarás a entender un poco mejor al PNV”.
Aznar me pidió que le acompañara en su coche al restaurante Jockey. Estuvo muy afectuoso. Comprobé el peso de las puertas de un coche blindado. En uno de los comedores privados comenzamos con una merienda que se convirtió en cena. Aznar, Rajoy, Rato y Mayor Oreja por un lado y Arzalluz y yo por el otro.
Arzalluz cuando quiere ser encantador lo es. Y aquella noche estuvo especialmente agradable y simpático. Les contó su viaje a Praga hacía veinticinco años con su mujer, les narró las excelencias del txakolí que cultivaba, les habló de la negociación y de gentes varias del PP. El vino que tomamos fue Pesquera. Como concesión, un hombre tan parco como Aznar nos dijo que aquel lunes había dormido muy bien. No se lograba todos los días un acuerdo entre el PP y el PNV. Brindamos. Me fijé en Rato. Lo hizo con una copa vacía. Arzalluz le dijo que eso no debería ser ningún presagio. Y, a las once, a casa.
SÍ A LA INVESTIDURA
Los días 3 y 4 de mayo de aquel año 1986 se celebró en el Congreso el Debate de Investidura. Me tocó la intervención en nombre de mi grupo. En los escaños, González de Txabarri, Emilio Olabarría, Margarita Uria y Jon Zabalia. Cuando Olabarría pasó al Consejo General del Poder Judicial fue sustituido por María Jesús Aguirre y al año por Carlos Caballero.
Fue muy llamativo el eco del acuerdo que encontramos en la calle. Telegramas, enhorabuenas y palmadas. La gente veía bien el pacto. Quizá también habría mucha gente que rechazara el acuerdo, pero en general el pacto fue muy bien recibido. Había que reconocer que Mayor Oreja y Aznar quisieron el acuerdo y al final lo lograron. También es preciso constatar la intolerable presión sindical que de no haber existido nos hubiera permitido un mejor acuerdo, pero tanto los sindicatos como los socialistas seguían tercamente aferrados a dogmas propios del nacionalismo español más rancio.
Los del PSOE andaban en el hemiciclo con la cara larga. Sin embargo, mantenían el acuerdo de gobierno en Euskadi con Ardanza en el ejecutivo vasco. Había que coger un manual para entender aquello. Como había sido para mí insólito el que cuando fuimos a Génova, 13, como habíamos llegado con tiempo, nos dedicamos a pasear y llegar, Arzalluz y yo, hasta la Puerta del Sol. Entramos en una librería. La gente en la calle felicitaba a Arzalluz. La típica mezcla amor-odio funcionaba en aquel momento en clave de amor. En la librería le pidieron autógrafos y le solicitaron que firmara libros. Insólito.
Aznar en su Investidura hizo un discurso de centro reformista tipo UCD. Lo más alejado de la derecha que podía esperarse. Anunció la eliminación de los gobernadores civiles y del Servicio Militar Obligatorio. Modificaría la Ley de Costas y la de Puertos. Devolvería el patrimonio incautado con motivo de la guerra. Actualizaría el Concierto Económico. Plantearía el diálogo como método de trabajo y desarrollaría y completaría el Estatuto de Gernika. Nos restregamos los ojos. Aquello parecía que iba en serio. Votamos que SÍ.
La apertura por parte de los Reyes fue el 8 de mayo. Tras los discursos, el almuerzo oficial. Previamente, la recepción. Aznar se nos acercó a González de Txabarri y a mí. Estuvo especialmente simpático y agradecido. Nos ensalzó a Arzalluz y nos dijo que se encontraba muy cómodo con él por su sabiduría política, su llaneza en el trato y su forma de abordar las cosas. Iba a poner por su parte todo lo que estuviera en sus manos para que aquella apuesta no fracasara y nos dijo que confiaba en nosotros de manera total. Ese mismo mes recibió a Ardanza en su despacho, y a Arzalluz, el 31 de mayo.
Pero todo aquello no llegó a durar dos años. El PNV había demostrado que era capaz de pactar con el PP y que su apuesta era la estatutaria. Fueron otros los que traicionaron aquel espíritu.
¿Alguien puede hoy extrañarse de la presentación del Plan Ibarretxe?.
Cuando se creó el partido UPyD, siempre pensé que ese partido estaba abocado a la extinción, como así ha sido y que el futuro de sus miembros era reciclarse en otros partidos (Irene Lozano PSOE y Toni Cantó CIUDADANOS), o terminar como contertulios en la derecha mediática, en la caverna/brunete mediática madrileña (ABC, La Razón, COPE, 13 TV, Intereconomía, etc.).
Ayer haciendo zappin, veo a Rosi Díez, ya de contertulia en el programa (o eso me pareció, no creo que era invitada sino contertulia, además se despidieron de ella diciéndole que la verían mas adelante...), me pregunto cuanto tardarán otros miembros (Herzog, Pagazartundua, Maneiro, Savater, Gorriarán, etc.), en seguir el mismo camino, algunos antiguos ex UPyD creo que ya están (Buesa, Uriarte aunque esta no se si llegó a ser de ese partido...).
Por supuesto el blanco del odio de estos medios son los nacionalistas no españoles y las izquierdas (principalmente el PSOE).
Rosita Díez, podía haberse vuelto a su ex puesto de administrativa en un ayuntamiento o seguir jubilada con una muy buena jubilación (ha sido ex consejera gobierno vasco, ex parlamentaria europea, ex diputada, etc.), pero ha decidido volver a salir en los medios (supongo además que sus colaboraciones no serán gratuitas...).
Rosa Díaz se une de esta forma también a los socialistas y ex socialistas que salen en estos medios odiando sobre todo al PSOE (Leguina, Corcuera, Alberdi, etc.).
En el caso de Díez, era algo totalmente previsible..., pero desde luego el PSOE debería de hacérselo mirar, ¿cómo es posible que sea el único partido que genere estos odios dentro de sus miembros y ex miembros?, para hacérselo mirar.
Publicado por: txomin | 02/10/2016 en 10:01 a.m.
Por cierto Rosa Díez (como tant@s otras y otros), salió en 13 TV.
Publicado por: txomin | 02/10/2016 en 10:18 a.m.
Siguiendo con la campaña andaluza de reirse "con musha guaza" de los "vahcos" las comparsas gaditanas vuelven a la carga tomándola con los famosos apellidos.
Creo que no necesitan este tipo de inspiración pues tienen muchos motivos de descojono en su propia tierra.
¿O más bien motivos para llorar? ¡ERE mi niño!
Estos chiripitifláuticos que se rien de los demás, luego se mosquean si se rien de ellos.
Caso ejemplar el del bufón Dani Rovira, que bien que se parte el culo con nosotros para hacer caja y luego cuando le critican por prepotente e incompetente en la gala de los Goya, agarra un cabreo de órdago.
Sinsorgos.
Publicado por: CAUSTICO | 02/10/2016 en 11:38 a.m.
La tasa de paro en Cádiz supera el 40% mientrars que en Gipuzkoa no llega al 14%.
¿De qué se rien las chirigotas?
Publicado por: CAUSTICO | 02/10/2016 en 11:52 a.m.
El ministro de la porra en funciones, después de consultarlo con su consejero espiritual y en comandita con su ángel de la guarda ha dicho:
"ETA espera como agua de Mayo un gobierno PSOE-PODEMOS con el apoyo del PNV.
¿qué apoyo necesita su partido franquista y corrupto para seguir robando?
¿por qué en lugar de decir imbecilidades de este tipo no atiende a sus sindicatos policiales para proveerles de lso mediso necesarios para prevenir y luchar contra el terrorismo islamista?
¿no da miedo a los españoles tener un ministro de este pelaje?
¿el PNV seguirá callaldito ante ataques de este cariz?
¡Qué pais más demencial!
Publicado por: CAUSTICO | 02/10/2016 en 06:08 p.m.
Para no dar que hablar en una situación tan delicada del estado, Letizia ha sacado de su fondo de armario ropa de tonos sobrios y joyas discretas.
¡Ya estoy más tranquilo!
Publicado por: CAUSTICO | 02/10/2016 en 06:18 p.m.
Salen de la cárcel los dos titiriteros.Se les acusa de fomentar el odio.
Una banda neonazi agrde a varios jóvenes en Murcia.
No se les acusa de nada.¡Por dios, angelitos!
Publicado por: CAUSTICO | 02/10/2016 en 06:22 p.m.
Un tribunal de Cádiz condena a una multa a un funcionario que cobró el sueldo durante 6 años sin ir a currar un solo día.
Ja ja ja.Buen tema para las chirigotas del año que viene.
Publicado por: CAUSTICO | 02/11/2016 en 09:35 a.m.
Ahora explota toda la corrupción de Madrid en Génova, salpicando a todo el PP de Madrid y el español, Rajoy, Aguirre, Cifuentes, etc., estos no tienen solución.
Publicado por: txomin | 02/11/2016 en 10:31 p.m.