Un libro de Basaldua
Ha llegado a México el libro de nuestro compatriota Pedro de Basaldua, titulado "En España sale el sol", de "Editorial Orden Cristiano", de Buenos Aires.
Basaldua, católico vasco que asistió al desarrollo de la guerra provocada por el franquismo español, recoge en esta interesante obra los documentos más importantes en torno a la posición de los vascos, de su Gobierno y de su clero. Documentos Irrefutables que condenan a los que, olvidándose de toda caridad cristiana y de la doctrina de la Iglesia sobre el acatamiento al poder legalmente constituido, iniciaron una guerra que había de originar semejante derramamiento de sangre y había de sembrar la inquietud en los espíritus más recios y creyentes.
El planteamiento del problema es claro, y sus argumentos contundentes. Lectura que fortalece el ánimo de los que nos enfrentamos a la sublevación de Franco con una convicción religiosa, y que da luz sobre muchos aspectos que aparecían confusos a los ojos de observadores de otros países.
Con obras como ésta, la verdad se abrirá paso en las conciencias y se conocerá quiénes se apegaron a la ley y quiénes la violaron en provecho de sus intereses privados.
"En España sale el sol" ha tenido una excelente acogida en México, y auguramos que su difusión va a ser de la complacencia del autor, a quien felicitamos por su exposición del problema vasco.
Abril de 1947 (E. Deya 83)
La doctrina de la Iglesia Católica desde León XIII era acatar las autoridades civiles y no apoyar guerras civiles pero esto era la teoría porque en la práctica seguían habiendo amplios sectores integristas en la iglesia. En la Iglesia Española había triunfado la obra de Sardà i Salvany EL LIBERALISMO ES PECADO que se oponía a cualquier negociación con el estado liberal y proponía recristianizar por la espada. Así que probablemente la Iglesia Española era más conservadora que el Vaticano mismo. Durante los años 30 se vería claramente que la Iglesia no estaba dispuesta a aceptar la separación entre la iglesia y el estado y desde las iglesias se atacaría a aquella República masónica. El obispo Irurita de Barcelona se dedicaba por ejemplo a atacar a Companys por ser masón.
Que la actitud radical de la iglesia contra la República fue una de las causas de la Guerra Civil creo que no se puede negar. Al fin y al cabo en los años 30 ser católico significaba ser de derechas.
Publicado por: Señor Negro | 07/25/2017 en 12:52 a.m.