Poeta de los caminos
y del cántaro casero,
del tejado sin palomas
y la noche sin lindero
(MOS)
Se murió Pedro Sotillo,
llanero de pura cepa,
queso rallado en la arepa
y melado en el quesillo.
Llevaba lleno el bolsillo
de canciones y de trinos,
papeles con versos finos
de los que Canta Simón:
era todo corazón,
poeta de los caminos.
Se murió Pedro Sotillo,
llanero de arriba a abajo,
caporal en el trabajo,
mediecito en el sencillo,
bailador del Pajarillo
en el joropo llanero,
se murió y casi me muero
porque en el adiós lejano,
nos dejó el dolor del llano
y del cántaro casero.
Se murió Pedro Sotillo,
llanero a carta cabal,
agua fresca en manantial,
potro libre sin casquillo,
panal de miel amarillo,
mastrantal de cien aromas,
carta con puntos y comas
desde el campo a la ciudad
escrita en la soledad
del tejado sin palomas.
Se murió Pedro Sotillo,
llanero fiel guariqueño,
el de la copla sin dueño,
de la soga y el novillo,
el del golpe en el martillo
y la garza en el estero,
hoy que dejó su sombrero
puesto en la melancolía,
lo llora de nuevo el día
y la noche sin lindero
Por: Grateloracho
(El Nacional, 12 de Mayo de 1977)
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