Monseñor Carlos Anasagasti y Zulueta, obispo del Beni (Bolivia) celebra sus bodas de Plata, como obispo, en la parroquia de San Francisco de Bermeo.
Monseñor Anasagasti nació en el Barrio de Demiku (Bermeo ) el día 4 de noviembre de 1910 . A los 15 años tomó el hábito franciscano en Zarauz e hizo su carrera eclesiástica entre Olite, Aránzazu y Alemania, ordenándose de sacerdote a los 24 años. Al comienzo de la guerra se alistó como Capellán de los gudaris, perteneciendo al batallón “Avellaneda”, compañía Muñatones, acompañando a sus gudaris hasta Laredo. Y, con sus hermanos gudaris, fué conducido al penal del Dueso y sometido a juicio, saliendo absuelto de toda culpa y conducido de aquí al campo de concentración de San Pedro de Cardeña (Burgos).
A la salida de la prisión, a petición propia, fue a las misiones del Paraguay. Desde su llegada, se distinguió por sus iniciativas en beneficio de sus fieles, tomando parte en toda clase de actividades religiosas, sociales y culturales y, hasta deportivas. Era vice - presidente del Club de Fútbol de Villarica. Con frecuencia tenía que recorrer hasta 80 Kilómetros a caballo, por caminos desiertos, en plena selva, para atender a los enfermos. Para beneficio de sus feligreses, y con la ayuda y cooperación de éstos, construyó un puente de 76 metros, que lleva el nombre de “Puente del P. Carlos”, haciendo de capataz , ingeniero y obrero, pasando muchos apuros para poder pagar a los trabajadores a fin de semana , pero cumpliendo siempre generosamente con ellos. Durante su estancia en Villarica, fue algunos años Pro-Vicario General de la Diócesis, supliendo al obispo en las visitas pastorales, sobre todo , a las colonias de alemanes .
Nombrado por la Santa Sede el 15 de Junio de 1951 Administrador Apostólico de la misión del Beni (Bolivia) el Gobierno Paraguayo le condecoró con la “Cruz de Caballero”, en premio a sus múltiples actividades.
El 29 de Junio de 1953 fué nombrado por el Papa Pio XII, obispo titular de Caltadria y Vicario Apostólico del Beni, y, consagrado obispo por el Cardenal Piñedoli en la catedral de Trinidad, el día 13 de Septiembre del mismo año .
Durante los 25 años que lleva de obispo, con la colaboración entusiasta de sus misioneros y fieles, destacando la ayuda de los católicos alemanes, construyó parroquias, colegios, asilos, y hasta campos de aterrizaje para los aviones, tomando parte en toda clase de actividades de toda la inmensa región del Beni, siendo en la actualidad una de las misiones mejor organizadas. Desde hace años contaba con un avioncito, que últimamente pilotaba Monseñor Anasagasti con el que pueden llegar a todos los centros misionales. Posteriormen, salió para el Beni el P. Mendizabal de Motrico, después de haber hecho sus prácticas como aviador en Fuenterrabía y en adelante fue el aviador del aparato, que fue bautizado con el nombre de “Reina del Cielo”, que por muchos aterrizajes forzoso, siempre sin ningún herido grave, gracias a Dios, fue rebautizado por algún guasón como “Reina del Suelo”.
Sus 39 años de vinculación con los pueblos de Paraguay y Bolivia no menguaron su amor a EUZKADI y al euskera que habló con naturalidad, interesándose vivamente por las aspiraciones de nuestro pueblo.
Los domingos por la noche comentaba los triunfos del “Athletic de Bilbao” y la “Real Sociedad” endulzando los triunfos con un trago de cerveza, si las apuestas eran favorables. Aunque el calor era insoportable, no podían permitirse un trago de cerveza, sino en las fiestas grandes.
Hay dos equipos de juveniles que llevan el nombre del “Athletic de Bilbao”.
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