
Ayer fueron enterrados en Rosas, en el Alto Ampurdán, los restos mortales del antiguo alcalde de Barcelona, ministro de la Segunda República y consejero de la Generalidad republicana, Caries Pi i Sunyer, que habían llegado en la misma mañana de ayer a Barcelona, por vía aérea, procedentes de Caracas, donde falleció en 1971.
Carlos Pi i Sunyer fue ingeniero, especializado en la docencia y en la elaboración de estudios económicos. Ocupó varias consejerías en la Generalidad republicana, fue ministro de Trabajo en el Gobierno de Martínez Barrio (octubre 1933) y alcalde de Barcelona entre febrero de 1934 y junio de 1937 (aunque fue suspendido y encarcelado durante el bienio negro).
En el exilio, entre 1941 y 1945, fue presidente del Consejo Nacional de Cataluña, organismo con sede en Londres y directamente vinculado al proceso bélico de las fuerzas aliadas contra las del Eje.