Sábado 14 de noviembre de 2020
El jueves 20 de enero de 1977, el mismo día en el que Jimmy Carter juraba su cargo como presidente de los Estados Unidos, dimitían los gobernadores civiles y jefes provinciales del Movimiento de Bizkaia y Gipuzkoa. No podían soportar la instrucción que les había dado el entonces ministro de la gobernación, de permitir ondear la ikurriña. Como se ve en la foto, la Diputación de “Vizcaya”, reducto del poder negurítico, decía que en el Palacio Provincial ondearían “únicamente la enseña nacional y el pendón del Señorío”. Seis meses después fueron barridos en las primeras elecciones legislativas. Gentes que habían propiciado se eliminase hasta el Concierto Económico. Afortunadamente, lo que Bildu llama “el régimen del 78, empezó así.
El gobernador civil de Bizkaia era un Fiscal del régimen que había sido Delegado de Información y Turismo (el responsable de la censura) y muy amigo del entonces ministro Manuel Fraga Iribarne de nombre José Antonio Zarzalejos Altares que ya la víspera había tomado posesión de su cargo en la Audiencia Territorial de Madrid.
Zarzalejos era padre de una saga de hijos que han destacado en la política e información española como Charo, José Antonio y Javier que es en la actualidad eurodiputado del PP y fue jefe de gabinete de José María Aznar. Su otro hijo, del mismo nombre que el padre, fue director de El Correo Español y del ABC y hoy está en la sala de máquinas de El Confidencial.
Dicen que los hijos no son responsables de los actos de sus padres pero también hay un dicho muy gráfico que nos ilustra que “hijo de gato, caza ratones”. En el caso de José Antonio y de Javier los dos han sido beligerantemente enemigos del nacionalismo vasco. Como comenté en el post de la semana pasada José Antonio dirigió la actual serie de Netflix, ”El Desafío: ETA” donde de manera clara omitía todo lo que el PNV había hecho para la desaparición de ETA. La versión del fin de ETA es la de la Guardia Civil y al final la de Egiguren.
Finalmente recordar que en Caracas y a instancias nuestras, una pareja de periodistas le preguntaron al entonces ministro Fraga si permitiría ondease la ikurriña. Contestó airadamente que eso no ocurriría porque antes había que pasar “por encima de su cadáver”. Luego se tuvo que chupar todo lo que vino.
También las claves actuales de la política española vienen de estos lances donde se demuestra que la mala bilis de sus antecesores sigue imperando en sus descendientes.
Lo malo es que ahora con Internet..., todos estos medios (El Correo, ABC, etc.), están de capa caída (pese a que aunque sean deficitarios, no paren de inyectarles dinero privado a fondo perdido y público cuando pueden), pues la gente se informa por Internet... (incluso por canales extranjeros...), además de perder las elecciones, se les está jodiendo el juguete (que además de ineficaz, les sale "caro"...), por supuesto este proceso hasta completarse tardará su tiempo y tampoco es perfecto, pero ahí vamos..., nunca se volverá al pasado.
Publicado por: Sony | 11/15/2020 en 07:40 p.m.
Se comenta que si Trump no recibe el apoyo republicano, igual se plantea crear un nuevo partido con todos los votos que tiene.
Publicado por: Sony | 11/15/2020 en 07:43 p.m.
Me pregunto si la estación "Indalecio Prieto" (estación del norte de trenes), no podría pasar a llamarse en un futuro, "Horacio Echevarrieta" (y sustituir la estatua de Prieto por la de Echevarrieta), este último era vasco, hizo cosas por los vascos, republicano, conocía a Prieto y no es alguien controvertido cómo Prieto..., sería un acto de justicia.
Publicado por: Sony | 11/15/2020 en 07:48 p.m.
Es curioso cómo la historia se repite o es cíclica y algunos se convierten en precisamente aquello que odiaron o combatieron.
Al terminar la guerra civil, el franquismo hizo una limpia de cualquier intelectualidad (incluso más allá de la que era claramente de izquierdas o republicana, pues cualquier intelectualidad podría serle un problema en cualquier momento, salvo quizás la muy afín), creo que esto quedó claramente definido por Millán Astray (el fundador de la legión) cuando dijo, ¡VIVA LA MUERTE, MUERA LA INTELIGENCIA! y bien que lo cumplieron mediante muerte o exilio.
Recordemos que ese lema (¡VIVA LA MUERTE, MUERA LA INTELIGENCIA!) o un hacer similar..., lo cometieron los nazis con los intelectuales de los países que invadieron (antes habían empezado por la misma Alemania).
Además tras la guerra civil, hubo 40 años de adoctrinamiento de la población española, ahora puede no haberlo, pero esos 40 años hicieron mella en gran parte de los futuros padres y profesores y algo siempre queda (no en todo el mundo, pero si en unos cuantos).
Los llamados intelectuales actuales, la intelectualidad oficial u oficialista (Savater, Boadella, Juaristi, Dragó, Escohotado, Trapiello, Elorza, Cercas, Vargas-Llosa, Muñoz Molina, etc.), vive una autocomplacencia viejuna endogámica cerrada total, y una vergonzosa "luna de miel" con el poder del que sacan buenos réditos..., mostrando una ceguera absoluta con lo que ocurre en el país y el propio mundo (crisis, corrupción, impunidad, pobreza, COVID, etc.), de los que poco o nada dicen, ni tienen que decir.
Se han adherido a una idea de España, que puede ser mejor que la dictadura pasada, pero no llega ni de lejos al nivel de las democracias que nos rodean (y nada parece indicar que se quiera cambiar), además de tener ideas que cuando menos vemos luego en la boca de la ultraderecha.
También es cierto que muchos de estos provienen de aquellos que ganaron la guerra, jugaron al rojito de jóvenes hasta que se aburrieron, o reconocen que nunca fueron muy de izquierdas.
Pero lo más curioso es que algunos se dedicaron a perseguir en su juventud, a los que ellos llamaban "Intelectualidad Oficial" del régimen franquista, que es lo mismo que son ellos ahora "Intelectualidad Oficial" del régimen del 78.
Por ejemplo Boadella, acusaba de "Intelectualidad Oficial", en sus comentarios y obras, a artistas catalanes cómo Tápies o Dalí, que es exactamente lo mismo que es el ahora..., irónicamente..., un "Intelectual Oficial", uno de los de siempre, de los que siempre sale, de los que siempre se consultan, de los que reciben favores, dineros y cargos.
Esto no es nada nuevo, pasa desde hace mucho, hace mucho y en muchos sitios que hay "Intelectuales Oficiales", ¡que le pregunten a Boadella sobre Tápies!, o mejor..., que se mire el mismo Boadella (y su pandilla) en un espejo, pero hay que denunciar el tema (como el hizo...).
Se puede decir que no es lo mismo ser cómplice de una dictadura, que cómplice de una democracia, puede ser..., pero..., esta democracia, no es una república aunque así nos lo quieran vender y dista mucho no de ser perfecta (eso nada), sino siquiera de tener los niveles democráticos del entorno (sin que esta "Intelectualidad Oficial", cómo decía Boadella de otros, y a la que ahora el pertenece, haga la más mínima crítica..., ni siquiera a lo que claramente no funciona..., a partir de ahí, eres un "Intelectual Oficial" más..., buen vivir y poco que aportar a la resolución de graves problemas reales que niegas..., te conviertes en cómplice de lo que ocurre).
Al final cómo dijeron aquellos viejos fascistas que al menos eran muy claros en lo que querían (a diferencia de otros que nombramos, que son ambiguos, tibios, equidistantes, tendenciosos... y que viven de su pretendida gloria pasada), ¡VIVA LA MUERTE, MUERA LA INTELIGENCIA!, y lo consiguieron..., vaya si lo consiguieron..., no hay más que verlo.
Publicado por: Sony | 11/15/2020 en 09:48 p.m.
Conspiranoicos y la autarquía demencial.
https://www.diariodeavila.es/Opinion/ZEEF9B795-A302-C30C-DD2F9211B270DDC1/202011/Conspiranoicos-y-la-autarquia-demencial
Publicado por: Sony | 11/16/2020 en 10:34 a.m.