Josu Bergara cumple este martes 29, 85 años. Quien fuera, Juntero, parlamentario, secretario del EBB, Consejero, Diputado General celebra su onomástica con buena salud, mente despejada y yendo cada viernes a comer con un grupo del Athletic a discutir de todo y arreglar el mundo. Pasea, lee, oye música, va a los conciertos, es un gran melómano y el órgano del Euskalduna está ahí por decisión suya, y a veces se indigna por lo que ve pero su habitual discreción traga algunas insensibilidades o faltas de respuesta. Trabajó en la empresa privada en Santander, Gasteiz y Bilbao entre 1964 y 1977 donde ocupó puestos relevantes. Casado con Rosa M. Eder, tiene tres hijos, Carlos, Josu y Mikel y una hermana, Mariemi que vive en Gasteiz.
Su ama procedía del caserío Ugarteko que estaba donde se encuentra en la actualidad el campo de fútbol de los Salesianos. Juan Mari Atutxa bautizó la Comisaría Central de la Ertzantza con ese nombre a sugerencia de Bergara. Ese es el motivo del nombre de Ugarteko. Josu le regaló un cuadro del caserío que no sabe si seguirá ahí.
Josu Bergara nació en Deusto en 1935. Su aita fue un gudari herido en la guerra. Iban en un coche conducido por él cuando un avión les ametralló. De los cinco se salvaron Teodoro Aguirre, hermano del Lehendakari y él, al que le lesionaron el codo. Tres murieron. En el hospital de Getxo les atendieron muy bien. No quería quitarse las botas pues llevaba quince días con ellas puestas. Al final les dieron un puro. Nos lo contaba diciendo que seguramente era porque estaba con el hermano del Lehendakari. Estuvo en el batallón Larrazabal, con mi aita, aunque los jóvenes del batzoki de Deusto iban a la compañía Arbola Gaña del batallón Arana Goiri. Tras la guerra estuvo en un Batallón de Trabajadores y, como entendía de mecánica, estuvo en el Parque Móvil.
Con semejante historial la compañía Braso lo mandó como viajante a Valencia donde su hijo Josu, con cuatro años, dio sus primeros pasos escolares y con 9 a Sevilla. Volvió y como es cabeza cuadrada estudió ingeniería doctorándose .Ajuriaguerra dejaba solo a los ingenieros que le tutearan. Fue el primer presidente, tras la clandestinidad, de la Organización Municipal de Deusto, y elegido burukide del BBB en febrero de 1977. Trabajó con Ajuriaguerra en la ponencia de organización de la salida del PNV de la clandestinidad. Fue miembro de aquel primer Bizkai Buru Batzar presidido en 1977 por Ajuriaguerra y luego por Antón Ormaza. Como miembro de las primeras Juntas Generales de Bizkaia en 1979 fue portavoz del Grupo EAJ-PNV.
En 1980 fue elegido parlamentario por Bizkaia del primer Parlamento Vasco y elegido coordinador del Grupo EAJ-PNV. Le llamábamos “el sargento Bergara” y yo iba con él y con varios al Parlamento en su Seat 127 al que llamábamos “la Bergaresa”. Tras la división del PNV en 1986 fue elegido secretario del EBB. El con Carmelo Sáenz de la Maza y Rafael Suso, bajo la dirección de Xabier Arzalluz, adecúan el partido a los nuevos tiempos y organizan la Asamblea de Zestoa y la del Arriaga que inicia la recuperación electoral del PNV tras aquel trauma de la división y es lo que actualmente sigue funcionando como estructura. De allí pasó en 1991 al Gobierno del Lehendakari Ardanza como Consejero de Obras Públicas y Transportes. El Metro de Bilbao, Puertos, la transferencia de Aguas, carreteras, el Bec, el Palacio Euskalduna, el Guggenheim con Ortuondo, EITB en su actual ubicación en relación con Andoni Ortuzar, saneamiento de la Ría de Bilbao, Zabalgarbi y diversas infraestructuras tienen su huella. Elegido Diputado General de Bizkaia presidió la Diputación dos períodos entre 1995 y 2003.
Con semejante caudal de experiencias siempre me dice que no escribirá sus memorias, ni sus reflexiones con lo que nos perderemos una parte importante de la historia de estos cuarenta años. Este nuevo año, en el que se anuncia un trabajo de relanzamiento del PNV en su 125 aniversario, creo que se debería crear una especie de Foro de la Experiencia, movido por gente joven, para que todo este caudal de vivencias no se pierda. Si decimos que la cadena no se rompe, este eslabón está por contar antes de que los de Sortu nos ilustren como se ha hecho y se debe hacer la política en este país.
El dibujo que ilustra este post es de K-Toño Frade. Se lo obsequiaron en el 2003 sus colaboradores de Acción Social con un lema que lo define bien.
“Bizkaino lo quiero, corto en palabras, en hechos largo”.
Ese ha sido y sigue siendo, Josu Bergara, un afiliado, un militante jelkide del EAJ-PNV. Una buena persona. Un servidor público.
Comentarios