28 de Diciembre de 1959
Excmo. Sr. D. José Antonio de Aguirre
50, rue Singer
París, 16
Mi querido amigo,
He leído en Euzko Deya la carta que ha dirigido Vd. a Eisenhower con motivo de su visita a España. Su texto viene a confirmar mi inveterado pesimismo sobre el porvenir de nuestra patria común, fundado en la actitud, a mi ver, trágicamente extraviada de ciertos elementos influyentes del País Vasco y de Cataluña.
No leo en efecto en su carta ni una sola palabra que sugiera solidaridad con el resto de España. ¿Qué concluir sino que está redactada en un espíritu separatista? ¿Qué pensará Eisenhower de estos desterrados que a él acuden en desorden disperso?
Esta carta viene a añadirse a mis observaciones anteriores: el fracaso de mis esfuerzos para obtener de Vd. y de los catalanes la menor declaración federalista - no separatista; el silencio de Landaburu ante mi carta sobre su libro. Todas estas reservas mentales a mi ver, revelan en vascos y catalanes una actitud que nos llevará irremediablemente a la tragedia: la sangrienta disolución de España.
Si esa actitud correspondiese a una realidad, si, en efecto, vascos y catalanes no fueran españoles, su separación de España me parecería objetivamente necesaria y beneficiosa. Pero lo grave de la actitud separatista es que no es conforme a la realidad. Los vascos y los catalanes son españoles; y al negarlo, de hecho o de palabra, nos llevan irremediablemente a la tragedia.
Vd. sabe que le habla un español sin ambiciones políticas, y con arraigadas convicciones federales. Si de mí dependiera, el País Vasco y Cataluña (y los demás reinos españoles) gozarían de una libertad federal no menor que la de los Cantones suizos. Pero me veo obligado a confesar mi sospecha de que el mayor obstáculo que los federalistas españoles hallarán mañana en su camino será esa tendencia separatista que nos amenaza a todos. Esta sospecha ha subido de punto con la lectura de su carta a Eisenhower.
Le saluda con la amistad de siempre
París, 24 de Febrero de 1960
Sr. D. Salvador de Madariaga
OXFORD
Mi querido amigo:
Perdone el gran retraso con que contesto a la suya del 28 de Diciembre. No he querido hacerlo antes de conocer la reacción de los vascos y también de algunos representantes de la democracia española ante mi escrito al Presidente Eisenhower.
A nadie ha extrañado el tono de mi carta, sólo a Vd. que cree "que está redactada en un espíritu separatista". Está redactada simplemente en la forma en la que un Presidente del Gobierno Vasco que representa a su pueblo después de veinticuatro años puede hacerlo, es decir, interpretando el sentir general de los vascos. Al decir los vascos me refiero lo mismo a nacionalistas, socialistas, republicanos como a sindicalistas, cuyas representaciones integran el Gobierno Vasco y su Consejo Consultivo. Nadie ha protestado, todos han apreciado oportuno el fondo y forma de la carta. Por qué?. Porque nada tiene que ver el "separatismo" con esta manifestación de disgusto ante la visita del Presidente Eisenhower a Madrid, hecha en un momento en que era necesaria y oportuna. ¿No le parece a Vd. que mi carta más bien es una muestra de solidaridad en la lucha contra la dictadura que ahoga la libertad vasca y la libertad de España?
El Gobierno Vasco es la autoridad democráticamente constituida por el pueblo vasco para regirse y para continuar sin descanso la ardua empresa de reconquistar la libertad perdida. Fue proclamado allá en Guernica y nació de la voluntad libre aplicando la ley constitucional que hizo posibles los Estatutos de Autonomía. La reivindicación de esta autonomía constituye, pues, una política y un programa varias veces ratificado. Su compatibilidad con la causa de la libertad de España es tan obvia que el Gobierno Vasco mantiene cordiales relaciones con el Gobierno de la República en exilio y con todos los demócratas españoles en general, y seguirá manteniéndolas hasta que el pueblo español diga libremente cuál es su voluntad. También loa vascos dirán entonces cuál es la suya. La democracia es una constante autodeterminación. Se oponen a ella las dictaduras de todos los colores y los espíritus intolerantes.
Surgirá de este libre juego de voluntades la Federación? Será restablecido el régimen de estatutos de Autonomía?. Triunfará un concepto confederal de acuerdo con la democracia portuguesa, dado el rumbo europeo y el desarrollo de las nacionalidades periféricas?. El futuro nos lo dirá.
Lo que sí puedo asegurarle es que el separatismo crece a medida que el régimen de dictadura se mantiene. Yo oreo que la relación de los vascos con España tiene como medida la libertad. A máxima libertad vasca, a mayor soberanía vasca, máxima y cordial unión con España, a supresión o mengua de la libertad, desunión y separatismo radical.
Y no se trata, don Salvador, de invocar el modelo de los cantones suizos porque ni es adecuado, ni sirve. Se trata de un problema de espíritu y de comprensión ante una realidad que crearon la naturaleza y la historia. Es un problema de pueblos, de nacionalidades con conciencia de sí mismos; organizarlos en la libertad, he ahí nuestra gran misión.
No pretenda Vd. presentar a Espada con ceño de guardia civil exigiendo a hombres y pueblos su cédula de español. Pueden contestarle que un gendarme del Norte del Bidasoa podría exigir a los vascos su cédula de francés. Presenten Vdes. siempre a España como a hogar capaz de albergar pueblos diferentes y libres que libremente también puedan crear un gran destino común. Es curioso constatar que esta concepción era mejor entendida y respetada por Carlos V y Felipe II que por los modernos liberales españoles. No hablemos de aquellos que dicen que Río de Oro es Guadalajara como nos lo hizo saber la prensa franquista al convertir aquellos territorios en provincia española imitando a los que en Francia dicen que Argelia es Angulema. Con éstos es bien difícil el diálogo. Son los que suprimieron la democracia, los que combatieron los Estatutos de Autonomía porque eran separatistas y catalogaron a sus adversarios -entre los que está Vd.- en la anti España.
Ya ve Vd. don Salvador, cuántos problemas encierra esta dura tierra ibérica sin que añadamos otros más. Yo soy un creyente en el hombre y siento por eso que nuestra victoria se acerca. Para acelerarla hace falta conjugar esfuerzos.
Los vascos hemos venido haciéndolo así desde el principio. Dígalo el Gobierno de la República a cuyo lado estamos mientras buen número de demócratas españoles le han abandonado cuando no atacado, dígalo el resto de las organizaciones lo mismo peninsulares que europeístas en las que estamos presentes. Y así pensamos seguir.
Ruégole perdone mi retraso y como siempre, con los mejores augurios, reciba un fuerte abrazo de su viejo amigo.
El rey Juan Carlos cumple este martes 83 años con la incógnita de su vuelta a España
1. Lamentable que esté cualquier persona mal, aunque es parte de la vida.
2. Muchas otras personas están mal y no tienen todas las posibilidades de esta persona.
3. ¿Os acordáis de Emilio Zaplana, el antiguo ministro del PP, que estaba muy malito, salió de prisión, se curó mágicamente, no volvió a prisión, no devolvió la pasta y no se ha vuelto a hablar más?, pues no es caso único..., hay más gente así..., además es como el cuento del pastorcillo mentiroso, decía que venía el lobo en broma, hasta que un día vino en serio..., no se le creyó, pero la culpa fue suya por utilizar la mentira tan profusamente.
https://www.heraldo.es/noticias/nacional/2021/01/04/el-rey-juan-carlos-cumple-este-martes-83-anos-con-la-incognita-de-su-vuelta-a-espana-1413268.html
Publicado por: Sony | 01/04/2021 en 07:22 p.m.