En un segundo estadio se encuentra su acción política en Nafarroa donde su talante colaborativo con el ejecutivo de Chivite busca recuperar un papel protagonista de fuerza alternativa al navarrismo-socialismo. Un influjo que en dos legislaturas consecutivas ha ocupado la formación Geroa Bai y que EH Bildu pretende sobrepasar en el próximo mandato.
Y en la Comunidad Autónoma Vasca su estrategia pasa por intentar arrebatar al PNV su liderazgo.
Si bien en los dos primeros ámbitos, la izquierda independentista ha experimentado su afán colaboracionista, en los tres territorios de la CAV, EH Bildu ha acentuado su papel de oposición más dogmática. Y no se entiende que alguien que pretende ser gobierno huya permanentemente de la responsabilidad o del compromiso constructivo.
Rechina, y de forma sonora, la posición parlamentaria de EH Bildu ante la gestión pandémica. Maddalen Iriarte ha repetido sin matices los mismos reproches hacia el gobierno de Urkullu una y otra vez. (En Nafarroa la complicidad en esta materia con el ejecutivo de Chivite es total).
Suyas son las repetidas acusaciones al gobierno de "improvisación", "desastre", "descoordinación", "falta de diálogo" o de "incapacidad". No han dudado en culpar a la consejera Sagardui de mentir, utilizando datos sin contrastar o abiertamente falsos. Su "todo está mal", su utilización miserable del sufrimiento pandémico, contrasta con el hecho de que en Euskadi, a día de hoy, uno de cada tres vascos haya recibido ya una dosis de las vacunas y que las inoculaciones practicadas estén por encima de la media del Estado. Pero que la verdad no estropee un buen titular.
Lo más triste de todo es que en ese papel de oposición rampante, EH Bildu no ha propuesto ni media medida que llevar a la práctica en Euskadi. Nada en clave constructiva. Ni una idea para garantizar la no progresión del virus. Ni para garantizar jurídicamente el marco decisorio. Todo lo ha convertido en denuncia, reprobación o censura.
Para ser alternativa hay que mirar al país, no al adversario. Hay que proponer, no denigrar ni menoscabar porque sí.
En el mismo BEC, en el mismo recinto en el que medio centenar de militantes de EH Bildu aplaudirán la estrategia de confrontación de sus dirigentes, miles de mujeres y hombres acudirán, en orden, escalonadamente y sin crispación hasta el pabellón 6. No participarán en mitin alguno. Acudirán allí en respuesta a la llamada del Servicio Vasco de Salud, que les vacunará con las dosis que en ese momento disponga. Será un contraste paradigmático. A un lado, los que afirman que todo se hace mal, y al otro, quienes buscan soluciones organizadamente. Unos, como las tropas de Aníbal, persiguen el botín del poder con implacables campañas de descrédito y otros aguantan el envite gestionando el día a día para preservar el bienestar común. Inteligencia frente a fuerza. Posibilistas frente a dogmáticos.
Por: Koldo Mediavilla
* Miembro del EBB de EAJ-PNV
Hay gente que ya califica al "Chiringuito" del español, de Madrid, de Toni Cantó, simplemente cómo corrupción... (darle un cargo, remunerado con dinero público, a un tipo, a dedo, creado exprofeso y que no sirve para nada, cuando menos porque es de los tuyos...), la verdad es que visto así, puede ser....
Publicado por: Sony | 07/12/2021 en 12:25 p.m.